Reseña – Wake Up Cthulhu
|Cuando te llega a las manos un juego que lleva el nombre de Cthulhu en el título te preparas para enfrentarte a mil horrores y sobrevivir. O, siendo más realistas, no volverte loco en la primera ronda.
Pero en este caso el enfoque es totalmente distinto: Cthulhu va a venir, lo sabes. Eres un cultista y has dedicado tu vida a ello.
A lo largo del juego deberás competir con otros sectarios para acumular puntos, a veces incluso perjudicando a los demás cultistas. Y es que a Cthulhu esto de ser competitivos y crueles siempre le parece bien.
«Wake up, Cthulhu!! es un juego de mesa de 2 a 4 jugadores con motor de cartas, basado en el universo de Lovecraft. Ganador del 1er concurso de Protojuegos de Verkami, ha sido creado por Miguel Bruque e ilustrado por Evelt Yanait. Y ha contado con la ayuda de Pak Gallego (Guerra de Mitos) para hacer de él un juego perfectamente equilibrado con una gran jugabilidad.» (Verkami)
Presentado a crowdfunding en la plataforma de Verkami en Abril de 2015, se fundó con una recaudación de más del 500% del objetivo. Y el juego no defrauda.
Al ser de pequeño formato es apto para transportarlo en el bolso o mochila. Por lo que lo hace una elección fácil a la hora de llevarlo encima para cualquier ocasión.
Consta de un pequeño tablero donde nuestras aspiraciones están representadas en forma de camino de velas hacia la llegada de Cthulhu, que iremos consolidando mediante cubos de conocimiento. Con ellos completaremos el camino de la invocación. Y, al finalizar el juego, el sectario que más cubos de conocimiento haya obtenido será el favorito del Primigenio. El resto serán tristemente devorados.
Componentes del juego:
– 61 fichas (15 por jugador + 1 para ver el avance del despertar de Cthulhu).
– 1 tablero.
– Reglamento en español, catalán, inglés y francés.
– 1 baraja de 100 cartas (56 mm X 87 mm).
Tipos de cartas:
- Con el reverso Marrón: Ingredientes. Pueden ser de 4 colores distintos y tienen su valor indicado en la esquina superior (entre I y IV, más un comodín que tiene valor V). Se utilizan para comprar Grimorios.
- Con el reverso Azul: Grimorios. Son de tres tipos distintos: Objetos, Hechizos y Maldiciones.
- Objetos: Están representados por el icono de un colgante, tienen indicado el coste de ingredientes y su color en el lateral superior izquierdo. Y su efecto se aplica a partir del siguiente turno, del propio jugador o de otro. El efecto viene representado en la parte inferior de la carta. Y con su compra se termina nuestro turno.
- Hechizos: Sus cartas están representadas por un pergamino. Se pueden utilizar de formas distintas y dependiendo del uso que queramos darle tendrán un coste u otro: Pagando el coste superior derecho podremos colocar el número de velas que se indique. Y pagando el coste superior izquierdo, realizaremos la acción que viene especificada en la parte inferior de la carta.
- Maldiciones: están representadas por el símbolo de Necronomicon y su efecto viene indicado en la parte inferior de la carta. No se especifica el coste porque la compra se realiza mediante subasta oculta. Para pujar por una Maldición utilizaremos los números de valor que vienen en las cartas de Ingredientes.
¿Cómo se juega?
Se coloca el mazo de Ingredientes barajado boca abajo. Los Grimorios se barajan y se dividen en se dividen en 6 mazos de 6 cartas, se levanta la carta superior de cada mazo comenzando el juego.
El turno de cada jugador consta de 2 fases. En la primera fase debes coger ingredientes hasta el máximo de cartas en mano, siendo este de 7 ingredientes. Una vez tienes tu mano completa procedes a la compra de un Grimorio de los mazos centrales.
Los Objetos se guardan en la mano y con esta acción termina el turno. Se pueden usar en nuestro siguiente turno o en el de otro jugador.
Los Hechizos pueden tener en su efecto un símbolo de reciclaje. En ese caso, tras aplicar el efecto continuaremos con nuestro turno.
Las Maldiciones finalizan el turno del jugador actual y hacen avanzar a Cthulhu una vela empezando desde el centro. Para adquirir las maldiciones se inicia una subasta. Cada jugador, siguiendo el orden de turno, está obligado a poner boca abajo al menos una carta de ingrediente en la primera ronda de subasta, en la siguiente podrás añadir otra o pasar. La subasta continúa hasta que todos pasan. Entonces se suman los puntos indicados en las cartas, y el ganador se lleva la maldición. Todas las cartas usadas se descartan. En caso de empate, gana el que menos cartas tenga en mano, y si sigue habiendo empate se van levantando cartas del mazo de ingredientes hasta desempatar.
Cuando adquirimos un Grimorio damos la vuelta al siguiente de su montón. Volviendo a tener 6 disponibles. Cuando solo haya 4 montones se baraja el descarte y se crean otros 2 montones de 6 cartas, dando la vuelta a la superior de cada uno.
El juego termina cuando Cthulhu avanza hasta la vela roja o cuando se coloca un cubo adyacente al que representa al Primigenio. De un modo u otro Cthulhu será finalmente invocado.
Es un juego rápido, sencillo y prácticamente sin dependencia del idioma. Pues todas las cartas, sus costes y sus efectos vienen representados por símbolos, sin texto alguno.
Además incluye adaptación de reglas para un solo jugador. Es muy rejugable y está perfectamente equilibrado independientemente del número de jugadores.
No se trata de un juego que profundice en el trasfondo diseñado por Lovecraft, ni que vaya a aportar nada a su historia, pero es un filler sencillo, rápido, divertido, rejugable y equilibrado. Y además va de Cthulhu. Y todos sabemos que con el Primigenio de por medio cualquier juego mejora.